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Cómo restaurar una silla

Maite Villoria nos enseña a restaurar una vieja silla. El primer paso que tendremos que dar, es desmontar la silla con el destornillador. Una vez desmontada identificamos con un rotulador cada pieza de la silla para que luego el montaje sea más sencillo.

Lijamos todas las partes de la silla para eliminar el barniz. Ensamblamos la silla de nuevo con cola de contacto y la fijamos con los sargentos para que se pegue bien.

A continuación pasamos a tapizar el respaldo y el asiento de la silla. Para realizar este paso grapamos la tela y cortamos los sobrantes.

Volvemos a la estructura y quitamos los sargentos. Pintamos con pintura sintética, dando dos o tres capas en función de lo que necesite.

Y de nuevo volvemos al asiento y el respaldo para decorarlos. Hacemos el dibujo con un lápiz o una tiza y repasamos con la pintura acrílica y un pincel.

Finalmente fijamos el asiento y el respaldo a la estructura y ya tenemos la silla lista y restaurada.

¿Qué vas a necesitar?

Lija

Destornilladores

Alicates

Disolvente de cola de contacto

Sargento

Cola de contacto

Pinceles

Tela

Grapadora

Tijeras

Pintura acrílica blanca

Pintura sintética negra