En el capítulo 21 de Date un capricho, Francine Gálvez visita Lolola una firma que se caracteriza por ofrecer un amplio surtido de ropa y complementos con colores y estampados divertidos y característicos de la casa.
Lacitos, lunares, y estampados muy originales dan lugar a distintos elementos a juego: vestido, bolso, cinturón, zapatillas…todo ello hecho a mano. Las camisetas, comienzo de la firma, siguen siendo parte importante de sus colecciones.
También los complementos son muy destacables, tanto de verano como de invierno, creando desde toallas de playa a juego con bañadores infantiles o guantes para protegerse del frío.
En segundo lugar, Francine visita La Californie, especialistas en la decoración de la casa y también en la organización de eventos, paisajismo o arquitectura interior, todo ello de una forma única y diferente.
Su oferta va desde los muebles antiguos hasta lo más modernos y nuevos, apostando por una mezcla de ambos, dándole personalidad a la combinación a través de las piezas vintage.
También las vajillas, cuberterías, cristalerías, mantelerías, principalmente francesas del siglo XX constituyen parte importante de lo que se puede encontrar en este espacio.
En tercer lugar, la presentadora visita Aurora Maroto, peletería especialista en convertir pieles antiguas y anticuadas en modelos renovados y llenos de tendencia.
Abrigos antiguos se transforman en este taller en chaquetas o abrigos mucho más modernos que crean volúmenes favorecedores y se adaptan al cuerpo perfectamente.
Esta peletería apuesta por cuidar también los detalles interiores haciendo forros originales y de gran calidad. Faldas, estolas o capas, de diferentes pieles de pelo largo o corto son todas confortables y no pesan gracias a su confección. Algunas se combinan con materiales como el encaje, que le aporta un punto sofisticado y original.
En último lugar, Francine visita Elisa Rivera, una casa que lleva más de 30 años en activo y que no sólo tiene sus propios diseños, sino que además comercializan otras firmas y hacen de estilistas para asesorar a las clientas.
Así, crean looks mezclando distintas prendas y dándoles aires diferentes dependiendo de la combinación de complementos. Apuestan por jugar con los fulares y también con sombreros o guantes.
A partir de un cuerpo básico blanco, sus propuestas lo convierten en una prenda ideal para el día a día o en una mucho más sofisticada combinada con una capa de máxima tendencia y complementos muy chic.
