En este capítulo veremos cómo una correcta distribución del espacio puede transformar una vivienda por completo. En este caso, Lorenzo y Ana son un joven matrimonio que vive en un piso de algo más de 28 m2; el espacio es reducido, pero la habilidad de Lorenzo para las reformas, ha convertido este piso en un acogedor loft en forma de cubo.
Inicialmente, la casa estaba dividida en cuatro habitaciones, pero Lorenzo decidió liminar todos los tabiques, y dejar un único espacio en forma cuadrada, a excepción del baño. La casa, de medidas proporcionales, dispone también de una pequeña terraza y dos grandes ventanales que aumentan la sensación de espacio.
La cama, situada en una segunda altura, es uno de los elementos más curiosos de la vivienda, ya que también está construida en forma de cubo y alberga un pequeño vestidor en su interior.
Esta joven pareja nos abre las puertas de su casa para demostrarnos que, independientemente del espacio, podemos construir un acogedor hogar.
