En el capítulo 3 de la serie Celebraciones Fáciles, María Vega de Seoane nos enseña a preparar la decoración y el menú para preparar una mesa muy colorida y campestre, pero, sobre todo, muy fácil de preparar.
Lo primero que elabora María es un mojito de sandía. Para ello mezclamos un chorrito de ron, azúcar líquida o azúcar moreno, sirope de sandía y un poquito de hierbabuena. Machacamos todos los ingredientes en un mortero y lo agitamos en la coctelera. Después ponemos un poco de hielo picado en las distintas copas y vamos sirviendo el cóctel. Para decorarlo, usamos una brochetas con unas bolitas de sandía que obtenemos gracias al «sacabolas» y hojas de menta.
El primer plato son volovanes rellenos. Para empezar, picamos varias lechugas de distintos colores y salmón en tiras, añadimos huevas de mojón, y un poco de mahonesa. Mezclamos todo en un bol y añadimos un chorrito de aceite de oliva. Después rellenamos los volovanes con esta mezcla y los decoramos con una hojita de lechuga.
El segundo plato es un steak tartar. Picamos la carne roja que puede ser solomillo de buey u otro tipo. Para hacer el aliño vamos a echar una yema de huevo por cada persona. Como este plato debe estar muy frío, ponemos un bol con hielo y dentro otro más pequeño donde vamos poniendo los ingredientes. Picamos un poco de alcaparras, pepinillos y cebolla en trocitos pequeños y los añadimos al bol. Ponemos también mostaza, mahonesa y mezclamos todo muy bien. A continuación, ponemos un chorrito de aceite y añadimos la carne. Seguimos mezclando, salpimentamos y emplatamos ayudándonos de aros para que quede bonito. Lo acompañamos con ensalada, tostadas de pan cortaditas en triangulitos y patatas fritas, que pueden ser de bolsa.
Como postre, María prepara fresas maceradas con helado de vainilla. Para macerar las fresas lo primero es cortarlas en laminitas. Después añadimos azúcar, vinagre de módena y limón. Lo dejamos reposar una hora y después añadimos el helado de vainilla, que podemos sacar con ayuda de dos cucharas para darle una forma bonita.
Por último, nuestra anfitriona pone la mesa. En este caso elige un mantel negro sobre el que coloca otro beige y salvamanteles con forma de hojas. Para la vajilla ha elegido el negro, para la cubertería el dorado y en cuanto a las copas mezcla distintas cristalerías. Para las servilletas, usa flores para decorarlas y hace dos centros de flores artificiales que terminan de aportan el color y el toque de jardín a la mesa.
